Barracas
La Policía de la Ciudad aprehendió a una pareja que vendía cigarrillos de forma ilegal en el Barrio Zavaleta de Barracas.
En Enero de este año, mientras realizaba tareas de ciberpatrullaje en las redes sociales, la División Delitos Informáticos Complejos de la Policía de la Ciudad descubrió que un usuario de Facebook realizaba venta de cigarrillos de diversas marcas, dudosa procedencia e inexplicable ingreso a nuestro país.
Luego de judicializado el caso, la Fiscalía actuante autorizó la realización de tareas de investigación pertinentes, que tuvieron como puntapié inicial un número de teléfono que era el publicado por el vendedor para que los clientes hicieran contacto y concretaran la transacción.
En una primera instancia, previa a la pandemia, la entrega del producto se hacía a través de una moto que funcionaba como delivery en los barrios de Pompeya, Constitución y localidades de la Zona Sur del Conurbano, próximas al ferrocarril General Roca.
Durante la investigación los efectivos de la Policía de la Ciudad pudieron corroborar que la persona detrás del negocio era una mujer, quien al iniciar la cuarentena y considerando que no contaba con permiso para circular, comenzó a fijar puntos de encuentro en zonas linderas al Barrio Zavaleta y tomando como referencia la intersección de las calles Luna y Olavarría; la terminal de colectivos de la línea 59 y el club de fútbol Barracas Central, donde se hacía presente junto a su pareja que operaba de guardaespaldas.
Mientras tanto, los brigadistas continuaban haciendo el relevamiento de la información en el perfil de Facebook de la mujer hasta que lograron establecer el paradero de la misma, momento en que se solicitó a la justicia la orden de allanamiento pertinente para desbaratar el comercio ilegal de tabaco.
Finalmente el Juzgado en lo Penal Económico Número 10 a cargo del Dr. Caputo y ante la Secretaría 19 de la Dra. Garzón, libró la autorización para poder realizar la pesquisa en una vivienda del Barrio Zavaleta, la cual se concretó en las últimas horas.
Personal de la División de Delitos Informáticos Complejos junto al DOUCAD, el DOEM y personal de Aduana, ingresaron al domicilio donde se logró el secuestro de 250 cartones de cigarrillos de las marcas Phillip Morris, Marlboro y Red Point, todos ellos apócrifos y de los que se desconoce la modalidad de ingreso al país.
También se incautaron siete celulares y una notebook. Dentro de la casa se encontraban las dos personas identificadas junto a tres menores de edad y otras tres personas mayores. Aunque el juzgado avaló lo actuado por el personal policial, NO autorizó las detenciones de los implicados.
Se labraron actuaciones por infracción a la Ley 22.415 del Código Aduanero que penaliza el contrabando.