Barracas
El viaducto irá a un kilómetro paralelo al Riachuelo e implica la construcción de dos estaciones elevadas ubicadas en las proximidades de las actuales Sáenz y Buenos Aires, y una nueva ubicada en un sector de la playa ferroviaria de Constitución, explica el texto aprobado por la Legislatura.
El desarrollo del viaducto, que tendrá 5,6 kilómetros, permitirá la realización de cruces ferroviarios elevados y eliminar los pasos a nivel de las Avenidas Sáenz y Amancio Alcorta, y de las calles Einstein, Cachi, Diógenes Taborda, Pepiri, Monteagudo y Zavaleta.
Además, dará continuidad a siete calles: Corrales, Tabaré, Ramírez, Fournier, Ochoa, Atuel e Iguazú, «beneficiándose así la seguridad del espacio público al eliminarse las calles sin salida».
Por otra parte, con la nueva estación Constitución se «evitará el trasbordo a líneas de colectivos en la Estación Sáenz o la realización de dos etapas en subterráneo para todos los usuarios del Ferrocarril Belgrano Sur con destino al Área Central, optimizándose el uso de la línea C y el Corredor Metrobus de la Avenida 9 de Julio».
Entre otros beneficios del viaducto, el proyecto menciona la «integración barrial» por la vinculación de «ambos márgenes de la vía ferroviaria».
También considera que, dado el alcance territorial de la línea Belgrano Sur, la nueva vía «brindara a los habitantes del suroeste del Conurbano y de las comunas lindantes a la traza del ferrocarril un acceso al área central directo, veloz y de bajo costo».
El Belgrano Sur tiene una traza de unos 80 kilómetros que van desde la cabecera –la estación Buenos Aires- desde la Capital Federal hasta las terminales Marinas del Crucero General Belgrano en el partido de Merlo, y González Catán en La Matanza.
Tiene una demanda potencial de alrededor de 500.000 habitantes residentes a menos de 1.000 metros de las estaciones de la línea y “su traza conecta las zonas más densas de los partidos de La Matanza y Merlo con la zona sur de la Ciudad, brindando cobertura a las zonas de más bajo nivel socioeconómico del Área Metropolitana de Buenos Aires”, indicaron fuentes del Gobierno porteño.
Respecto a las obras, y con el objetivo de «afectar en la menor medida posible los terrenos aledaños a las vías», la nueva traza irá «en su mayoría dentro de terreno ferroviario» y, para no interrumpir el servicio, el proyecto prevé el desarrollo del viaducto por sobre el ramal de cargas.
Con la aprobación del proyecto, se declararon «de utilidad pública y sujetos a expropiación» los predios «de la manzana delimitada por las calles Ramón Carrillo, Brandsen y las áreas afectadas al paso de las vías del Ferrocarril Roca».
La determinación del precio de los inmuebles de propiedad privada sujetos a expropiación se hará de acuerdo con la tasación del Banco Ciudad de Buenos Aires, «según lo establecido por el artículo 11° de la Ley N° 238», agrega el proyecto.