Aumentan colectivos en el área metropolitana de Buenos Aires

En forma sorpresiva, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, convocó a una conferencia de prensa en la noche del miércoles para anunciar que a partir del viernes próximo, el boleto mínimo de colectivos costará 1,50 pesos en el área metropolitana de Buenos Aires y el de trenes, 1 pesos. De este modo, el Gobierno busca ahorrarse unos $ 107 millones por mes en subsidios al transporte públicos de pasajeros.

En forma sorpresiva, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, convocó a una conferencia de prensa en la noche del miércoles para anunciar que a partir del viernes próximo, el boleto mínimo de colectivos costará 1,50 pesos en el área metropolitana de Buenos Aires y el de trenes, 1 pesos. De este modo, el Gobierno busca ahorrarse unos $ 107 millones por mes en subsidios al transporte públicos de pasajeros.

Al informar sobre el aumento de tarifas dispuesto por el Ejecutivo nacional y que incluye a los demás boletos que se expenden en las líneas de colectivos del área metropolitana de Buenos Aires, Randazzo aseguró que la medida apunta a lograr una distribución «más racional y más eficiente» de los subsidios que otorga el Estado.

Se trata de una suba promedio del 40 por ciento para quienes paguen en ambos casos con la tarjeta SUBE (Sistema Único de Boleto Electrónico), mientras que el resto de los usuarios, los que abonan con monedas, deberán afrontar mayores incrementos, de al menos el 50 por ciento: 3 pesos como mínimo, en lugar de los $ 2 actuales.

El pasaje mínimo en trenes pasará de 70 centavos a 1 peso, lo que implica una suba del 42,8%. En tanto, en colectivos, siempre para aquellos usuarios que abonen con la tarjeta SUBE, aumentará de 1,10 pesos a 1,50, lo que significa un incremento del 36,3 por ciento, señaló el funcionario, quien aclaró que el aumento es de apenas 40 centavos, el equivalente a «un caramelo».

Quienes paguen con monedas, tendrán que abonar a partir del viernes 3 pesos, en lugar de los 2 actuales, por un viaje de entre 0 y 3 kilómetros (mínimo) en las líneas de colectivos, lo que implica una suba del 50 por ciento.

En tanto, el boleto de 1,20 pesos (de 3 a 6 kilómetros) subirá a $ 1,60, un incremento del 33,3%, y el de $ 1,25 (de 6 a 12 km) pasará a costar $ 1,70, utilizando la tarjeta SUBE, un aumento del 36%: sin el plástico violeta, los pasajes se irán a $ 3,25 y $ 3,50, respectivamente.

Con respecto a los trenes de la región metropolitana de Buenos Aires, el boleto mínimo abonando con dinero en efectivo costará entre 2 y 2,25 pesos.

«La Presidenta (Cristina Kirchner) me pidió que avanzara con la segmentación de tarifas, porque nos va a permitir hacer un uso más eficiente de los recursos que el Estado destina al transporte pública, como así también apuntar a aquellos que más necesitan los subsidios», expresó Randazzo.

¿Quiénes quedan exentos?

Al anunciar la suba de tarifas, en el Salón de los Pensadores y Escritores de la Casa de Rosada, el funcionario aclaró que un determinado grupo de personas no se verá afectado por el aumento, en caso de disponer de la tarjeta SUBE. Se trata de los jubilados y pensionados; quienes cobran asignaciones por hijo o por estar embarazadas, en el caso de las mujeres; y los ex combatientes de la Guerra de Malvinas.

También seguirán pagando lo mismo por boletos de trenes y colectivos con la tarjeta SUBE quienes trabajen en casas de familia (empleadas o empleados domésticos) y los estudiantes primarios y secundarios, aunque en todos los casos deberán acreditar su condición en un plazo de 90 días, indicó Randazzo.

Con el aumento de tarifas, el Gobierno espera ahorrarse unos 107 millones de pesos por mes en subsidios ($ 1.284 millones por año), según precisó el funcionario. De acuerdo con Randazzo, la suba apunta a «hacer más racional, más eficiente el transporte de público», y agregó: «Esto tiene que ver con un ajuste de tarifas, no con la inflación».

El funcionario aseguró que el 80% de los pasajeros pagan el mínimo y destacó que pese al aumento la tarifa «siendo muy barata» en comparación con otras provincias: «Aumenta lo que vale un caramelo», dijo, en referencia a los 40 centavos del boleto que pasará a costar $ 1,50 este viernes.

Hace unos meses, el mismo Randazzo había asegurado que sin las compensaciones y subsidios los boletos de colectivos en la zona metropolitana tendrían que costar entre 4,23 y 5,09 pesos. «Estamos cambiando el subsidio de la oferta a la demanda, con el objetivo de «beneficiar a los sectores más vulnerables», insistió el funcionario, este miércoles.

«Éste es un paso más para que el aporte que hace el Estado se oriente a los pasajeros de manera más racional y eficiente, empezando a tener una mayor ponderación la demanda que la oferta», afirmó el ministro. Enfatizó que «sistema de transporte es una política inclusiva, de redistribución del ingreso» e indicó que con esta «segmentación», el Estado aporta el 71% del precio del boleto de colectivos y el 90% del pasaje de trenes, y aumenta la recaudación en $ 107 millones mensuales.

Por último, señaló que «la instrumentación de la tarjeta SUBE fue absolutamente exitosa», agregó que «hoy la utilizan más del 95 por ciento de los pasajeros», lo que permitió al Estado nacional un ahorro mensual de $ 90 millones.