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Tras ser rescatado de un incendio en una casa del Barrio 31, los bomberos de la ciudad le tuvieron que dar oxígeno a un perro de la familia para reanimarlo. El episodio ocurrió el pasado miércoles cerca de las 23 y no se registraron víctimas.
Los hechos ocurrieron en la planta baja de un edificio de dos pisos. El perro fue encontrado en el interior de una de las habitaciones y luego retirado del lugar por un agente.
También recibieron asistencia respiratoria la hija de la propietaria del inmueble, a una mujer y a otro hombres que vivían en la casa.
Además, un vecino del terreno lindero debió ser atendido. Todos fueron trasladados al Hospital Fernández, algunos de ellos con quemaduras.
Según el informe de los bomberos, el fuego se inició en un monoambiente de 16 metros cuadrados, destinado a sala de estar.