El corte de vías de la línea C, es realizado de manera inconsulta y a espaldas de la masa de trabajadores, por un grupo autodenominado Sindicato Trabajadores del Subte, que integró en su momento la patota de la UTA.
De manera oportunista se montan en reivindicaciones justas como la oposición a la instalación de máquina de recarga SUBE, que afectarán puestos de trabajo o a la falta de mantenimiento.
Explotan en su favor la pasividad actual de la conducción de la AGTSyP, ante la ofensiva flexibilizadora y de ajuste macrista. No se trata, como se pretende, de intercambiar instalación de máquinas por otras ‘concesiones’, sino de exigir que toda automatización y adelanto técnico se corresponda con un beneficio para trabajadores y usuarios.
No estamos de acuerdo con ninguna máquina que no forme parte de un plan integral de aumento de horario del servicio, mejores frecuencias; extensión de redes y reducción de jornadas y que sólo persiga el beneficio económico de empresarios y gobiernos a costa de los trabajadores
Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro