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La obra que Subterráneos de Buenos Aires está llevando adelante en la Central Obelisco forma parte del Plan de Modernización de la Línea D, que se realiza a través de un préstamo del Banco Europeo de Inversiones (BEI). Una vez finalizada, mejorará la accesibilidad, circulación y evacuación en uno de los puntos más congestionados de la red, el espacio donde combinan las líneas B, C y D, y por donde transitan diariamente unas 300.000 personas (prepandemia).
Así, para mediados de 2023, estará finalizado el nuevo pasillo en la estación 9 de Julio (sentido a Catedral), que permitirá agilizar la combinación entre las líneas B y C.
Las primeras dos etapas están finalizadas pero, a causa de la pandemia, la empresa que tenía a cargo la etapa III tuvo dificultades para continuar la obra y es por esta razón que se relicitó lo que resta por finalizar, de manera tal de concluir los trabajos lo antes posible.
Subterráneos de Buenos Aires realizó el llamado a licitación con un presupuesto oficial de 1.280 millones de pesos y, tras la adjudicación que tuvo lugar ayer a la unión transitoria de empresas conformada por SES S.A. y Construere Ingeniería S.A., resta la firma del contrato para comenzar con los trabajos, que tendrán un plazo total de 30 meses.